Las consecuencias de la contaminación en la salud infantil

En el mundo, el 93% de los niños viven en entornos con niveles de contaminación por encima de los recomendados por las directrices de la OMS.

En el mundo, el 93% de los niños viven en entornos con niveles de contaminación por encima de los recomendados por las directrices de la OMS y más de 1 de cada 5 muertes infantiles está relacionada con los riesgos ambientales.

En una investigación realizada en 2020 por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) y publicada en el International Journal of Enviroment Research and Public Health, se evaluó el impacto de la contaminación ambiental en la salud de los más pequeños. Este estudio reveló que el 33% de los casos nuevos de asma infantil en Europa son atribuibles a la contaminación atmosférica. Este hecho refleja la necesidad de poner en marcha políticas efectivas que vayan orientadas a la reducción de los contaminantes ambientales en toda Europa, en especial para reducir la carga de la enfermedad en la población infantil.

¿Cuáles son los efectos de la contaminación sobre la salud infantil?

La contaminación del aire en el hogar y fuera del hogar causa más del 50% de las infecciones respiratorias bajas agudas en países de rentas bajas y medias, según datos de la OMS. Además, está relacionada con el aumento y la gravedad de alergias respiratorias en los más pequeños y se asocia con el desarrollo de asma infantil. Los niños son más vulnerables que los adultos a sufrir las consecuencias de la exposición a contaminantes atmosféricos porque tienen las vías respiratorias más estrechas, pasan más tiempo al aire libre haciendo actividades físicas y respiran por la boca con más frecuencia que los adultos. Por todo ello, respiran más contaminantes del aire sin filtrar.  

 Por otro lado, durante la gestación también puede ser perjudicial la exposición de la madre a estos agentes. Se ha comprobado que puede alterar la población de células inmunitarias del recién nacido y predisponer a los niños a alergias y asma.

¿Qué contaminantes afectan a la respiración?

La SEICAP advierte que la contaminación con partículas puede provocar problemas respiratorios. Se forma cuando pequeñas partes de polvo, suciedad, humo, hollín y otros elementos quedan suspendidos en el aire. Cuanto más pequeñas sean las partículas, con más profundidad podrán entrar en los pulmones.

Entre las fuentes más contaminantes en ciudades hay que tener en cuenta las procedentes de la combustión de combustibles fósiles para la generación de energía, el transporte, la cocina residencial, la calefacción y la incineración de desechos. 

Por otra parte, este fenómeno deriva en una mayor cantidad de polen durante más meses al año. De este modo, los sujetos sensibles tienen síntomas más graves y duraderos debido a la mayor concentración polínica y al mayor tiempo de polinización.

El tabaco es el principal contaminante intradomiciliario en las casas de fumadores. Además de ser un hábito nocivo para el propio fumador, es una actividad que en el hogar contribuye al incremento de partículas en suspensión. De hecho, Sanidad se replantea prohibir fumar en los coches. La propuesta contempla que fumar solo medio cigarrillo dentro de un coche genera una contaminación 10 veces superior a los límites considerados peligrosos para la salud.

Recomendaciones de la SEICAP

Para revertir esta situación, la SEICAP recomienda contribuir a generar menos residuos contaminantes tanto a nivel particular como familiar, y así prevenir problemas respiratorios y alérgicos en niños y adolescentes. 

Así, es prioritario que los ciudadanos consuman solo el agua y los productos que realmente precisen, evitando el despilfarro por la carestía y la contaminación que conlleva ese comportamiento.