Desmontando 10 mitos sobre alergias infantiles

Uno de cada cuatro niños tiene algún tipo de alergia según la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica. A pesar de ello, en la actualidad todavía hay mucha información errónea sobre las alergias infantiles, y algunas de ellas ponen en peligro la vida de los niños.

Desde la SEICAP desmontamos algunos de los mitos más comunes:

  • Si los padres son alérgicos, el niño será alérgico. FALSO

No se hereda la alergia concreta. Aunque es cierto que puede haber una predisposición genética hacia la alergia, no todos los hijos de padres alérgicos acaban siéndolo. Se puede heredar la predisposición atópica, la susceptibilidad, la facilidad para desarrollar alergia en general, no frente a sustancias concretas. Como las personas se hacen alérgicas a las cosas que hay en su ambiente, es fácil que padres e hijos se hagan alérgicos a las mismas cosas, pero no porque se hereda esa alergia, sino porque comparten el mismo ambiente.

  • Es conveniente retrasar la introducción de alimentos en niños para prevenir alergias. FALSO

No es necesario retrasar la introducción de determinados alimentos por su potencial alergénico, como se hacía hace unos años muchos casos, ya que la proporción de niños con síntomas alérgicos no aumenta. La introducción tardía de alimentos alergénicos después de los seis meses de edad no se asocia a un menor número de enfermedades alérgicas a los dos, tres o cuatro años, tal y como se demuestra un estudio publicado en la revista Evidencias en Pediatría

  • Los niños con asma no deben practicar deporte. FALSO

Los niños con asma pueden y deben practicar cualquier deporte que les guste, siempre siguiendo una serie de recomendaciones. Para los niños que sufren dicha patología, el ejercicio físico les permite mantener una buena condición física, un peso adecuado y a la vez ejercitan la musculatura respiratoria que es positivo para su enfermedad. Los mejores deportes para los niños que padecen asma son los que alternan momentos de esfuerzo con momentos de descanso.

  • La alergia aparece al primer contacto. FALSO

La alergia no siempre aparece al primer contacto. Puede ocurrir que el niño se haya puesto en contacto previamente con dicho alérgeno y no la desarrolle y años después se enfrente y su cuerpo presente una reacción.

  • Las intolerancias y alergias alimentarias son lo mismo. FALSO

No, no son lo mismo. Las intolerancias alimentarias surgen debido a alteraciones metabólicas que impiden que el intestino absorba determinados tipos de nutrientes, lo que puede provocar diarrea o dolores tipo cólico. Por su parte, las alergias alimentarias se deben a alteraciones del sistema inmunológico que reacciona ante alimentos con síntomas que van desde los digestivos a los respiratorios y cutáneos, pudiendo llegar a ser más grave y provocar una anafilaxia, con dificultad para respirar, mareo o incluso pérdida de conciencia.

  • Los niños que sufren dermatitis atópica solo pueden bañarse dos veces a la semana. FALSO

Los niños atópicos pueden bañarse diariamente. Se recomienda que sean baños cortos, con agua templada y se debe aplicar crema hidratante cuando la piel todavía se encuentre humedecida.

  • El asma es una enfermedad contagiosa. FALSO

El asma no es una enfermedad contagiosa. Sin embargo, las infecciones respiratorias virales (como el resfriado común y la gripe) suelen provocar un empeoramiento o crisis en los pacientes asmáticos. Las causas del asma suelen ser diversas, incluidas las alergias, pero no se trasmiten entre individuos. Las causas para que aparezca asma pueden ser muy diversas, incluidas las alergias, pero no se transmite entre individuos.

  • Todos los alérgicos deben someterse a la inmunoterapia. FALSO

No todos los alérgicos deben someterse a la inmunoterapia. La inmunoterapia puede ser beneficiosa para todos los pacientes con síntomas de asma, rinitis, conjuntivitis, alergia a picaduras de himenópteros y alergia al látex. Para la alergia a la piel del melocotón, conocido como síndrome LTP, existe también una inmunoterapia sublingual, tratándose de inmunoterapia para alergia alimentaria. En cuanto a la edad, se recomienda su uso a partir de los cinco años.

  • Hay razas de perro que no dan alergia. FALSO

Todas las razas caninas son susceptibles de causar alergia. No hay ninguna evidencia que demuestre que los perros de pelo corto no den alergia. Puede haber perros que suelten menos pelaje, de manera que los alérgenos adheridos al pelo pasarían en menor cantidad al ambiente, pero los alérgenos del perro, presentes en la piel (caspa) y en la saliva, permanecen.

  • La rinitis alérgica es peor en primavera. FALSO

Suele pensarse que la rinitis alérgica se acentúa durante la primavera, pero no es así. Además de la alergia a los pólenes, hay muchos otros alérgenos como los hongos o los ácaros, por ejemplo, que pueden provocar alergias en otras épocas del año. De hecho, existen pólenes que pueden causar alergia a finales de invierno.

Un ejemplo de ello es la familia de las cupresáceas: formada por más de 125 especies. Su polen es de los alérgenos más potentes a los que los alérgicos se pueden exponer. por otro lado, también a final del invierno, se capta en el aire polen del plátano de sombra (Platanus hispánica, Plátanus hybrida o Platanus acerifolia). El período de polinización para las cupresáceas va desde octubre hasta abril, alcanzando sus máximos niveles en febrero y los niveles más altos de polen de platanero se detectan en el mes de marzo.