Los alergenos son sustancias, en general proteínas de pequeño tamaño, a las que una persona es alérgica. Su evitación o desalergenización es el conjunto de actuaciones encaminadas a disminuir o evitar por completo el contacto con ellos, y es parte fundamental del tratamiento causal de la alergia.
Pueden ser sustancias que se ingieren, que entran en contacto directo con la piel, o que flotan en el aire y se respiran. Así, su evitación puede consistir en medidas dietéticas, evitación de ciertos materiales o medicamentos, o control de alergenos ambientales.